Cuando se cuentan los votos y se declara el partido ganador, ¿qué pasa con los perdedores? En una democracia sana, su trabajo apenas está comenzando.
La idea de una “oposición leal” comenzó en la Inglaterra del siglo XVIII para permitir que el partido que quedaba fuera del poder expresara sus opiniones sin temor a que lo acusaran de traición. La designación “leal” significa que un partido opositor es leal a los mismos intereses y principios fundamentales del partido que se encuentra en el poder. Una oposición leal es legítima, constructiva y responsable. Las democracias sanas reconocen que un país se beneficia cuando el gobierno refleja una diversidad de voces y brinda espacio para el desacuerdo.
John Mbaku, miembro principal de la Institución Brookings, observó que muchas naciones africanas que se aseguraron la independencia en la década de 1960 no consideraron importante ni deseable tener una oposición leal. “La idea era que la construcción de la nación solo podría llevarse a cabo si todo el mundo estaba de la misma parte”.
Mandela quería un gobierno incluyente que representara a todos los sudafricanos, señaló Mbaku. “Mandela no iba a sustituir un mal sistema por otro. Su manera de abordar el gobierno era muy diferente de lo que se ve en la mayoría de los países africanos en la actualidad”.
Mandela entendía que una oposición leal hace que el partido mayoritario rinda cuentas ante el pueblo. En el Reino Unido, la rendición de cuentas se realiza en público: Durante “el período de preguntas” (en inglés) los parlamentarios interrogan al primer ministro, a veces de forma tajante, como en el video mostrado abajo. En la televisión y la prensa se realiza una amplia cobertura de las preguntas y respuestas.
En Ghana, donde las elecciones presidenciales se llevan a cabo en noviembre, la candidata de la oposición Nana Konadu Agyeman-Rawlings explicó el papel de la oposición leal en la rendición de cuentas del gobierno en el cargo: “Es nuestro deber patriótico, como ciudadanos de Ghana, no dar espacio a la complacencia con relación al gobierno en absoluto”.
En una democracia en desarrollo, el tira y afloja de un partido elegido democráticamente y su oposición leal ayuda a construir y fortalecer una constitución adecuada, un poder judicial independiente y un poder legislativo fuerte, instituciones que pertenecen a todo el pueblo.
“Si de verdad uno quiere dejar un legado como un buen líder africano”, afirmó Mbaku,”debe construir las instituciones que brinden a cada grupo del país la oportunidad de participar en la gobernanza”.
Aplica este termino en el trabajo y encontraremos que este concepto es inexistente y muchas personas consideran la leal oposición como algo personal y frustrante.